ALIMENTOS ENERGETICOS PARA LA SEGURIDAD Y SOBERANIA ALIMENTARIA DE BOLIVIA

La alimentación en un país como Bolivia es de vital importancia, pues si existe hambre en el pueblo se atenta contra su seguridad, así los habitantes serán debilitados y reducidos al destruir su seguridad alimentaria, y, por ende, la salud de la población y su desarrollo.Es decir, la alimentación es un objetivo sistémico, desde la doctrina de la Seguridad, Defensa y Desarrollo. La población boliviana per sé, busca disponer de alimentos saludables, accesibles y suficiente para poder vivir.Embarcados en ese encargo social, los actores del desarrollo agrario tienen la misión de lograr la seguridad alimentaria para todos los estamentos y estrato de nuestro país. La “seguridad alimentaria” de la población boliviana es prioritaria si se pretende pensar en consolidar un desarrollo sostenible.La Seguridad alimentaria planteada por los organismos internacionales viene en términos de mercado. Los bolivianos pueden encontrar sus alimentos, tanto en la producción nacional, como en la importación de alimentos competitivos. Esto implica la disponibilidad de alimentos, la suficiencia de ellos desde la nutrición, el acceso suficiente a los alimentos por las familias desde los ingresos disponibles; y beneficiarse con alimentos de calidad.Los alimentos en Bolivia desde el punto de vista de la organización productiva, viene accionada por los actores del desarrollo agrario en sus fases productivas, tanto primaria como secundaria. Es decir, los productores agrícolas vienen congregados por los empresarios agrícolas, los productores de la economía comunitaria, los cooperativistas agrícolas y las empresas estatales. Estas cuatro unidades constituyen la economía plural, quienes tienen que producir todos los alimentos de los bolivianos; se tiene que entender este criterio, como el logro de la “Soberanía alimentaria” en nuestro país.Todos los actores de desarrollo agrario llevaron adelante un evento que fue denominado la Cumbre Agropecuaria 2015, donde se buscaba un cambio de timón, para alcanzar el Hambre Cero, como objetivo del desarrollo sostenible, planteado por las Naciones Unidas. Se tomó como indicadores del cumplimiento de este encargo. Además, se concertaron metas, que fueron planteadas en las mesas de discusiones de este evento.Si bien la metas de la Cumbre Agropecuaria 2015, son orientadas por el Plan Nacional de desarrollo Económico y Social, están contenidas en las normativas sectoriales referentes a la producción agrícola y agroindustrial. Por otro lado, las diferentes estrategias y políticas agrarias, que impetran este cambio cualitativo; es decir, el Estado en su conjunto.Sin embargo, de manera dominante se considera que el comportamiento del sector agropecuario y agroindustrial, que no solo depende de su propio accionar, además está también el comportamiento del Estado y del mercado, a nivel global y regional. Esta también influenciado por las acciones de otros países en sus sectores agrícolas, impetrando un cambio en la dirección estratégica del sector agrícola.Se hace necesario conocer y analizar el direccionamiento de las predisposiciones que han ocurrido desde el año 2015 y poder diagnosticar su transcurrir en el presente. Es decir, se puede medir y proyectar las tendencias del comportamiento probabilístico, de las metas de la Cumbre Agropecuaria 2015 y determinar si tiene opciones de cumplirse o no. Del análisis individual por meta se puede tomar decisiones, para que esto puedan ser alcanzadas y proponer un nuevo accionar hacia futuro.Se considera que en Bolivia existen más de un centenar de productos agropecuarios, los cuales serán procesados de acuerdo con su importancia. Una manera de conocer su accionar es saber sus costos de producción, referente a la mano de obra, la maquinaria y los insumos agrícolas.Es de suma importancia estimar el cumplimiento de las metas de la Cumbre Agropecuaria 2015, pues significa que se ha logrado materialmente producir las necesidades de alimentación de la población. Desde los intereses de la oferta de alimentos, planteada por los productores y el Estado.